Mantener un estilo de vida saludable o saber gestionar el tiempo son técnicas que pueden ayudar a controlar la ansiedad
En DiR nos preocupamos por ti y sabemos que no están siendo días fáciles. Es posible que durante estos meses hayas sentido ansiedad, rabia, miedo, tristeza, apatía, incertidumbre, estrés o malestar general. En poco tiempo hemos tenido que adaptarnos a una nueva realidad y cambiar nuestras rutinas, lo que puede generar esta mezcla de emociones.
La ansiedad se activa como mecanismo adaptativo y de defensa que nos pone en alerta ante situaciones que se consideran una amenaza, pero cuando esta ansiedad se manifiesta de manera desproporcionada, se transforma en disfuncional.
Para nosotros es tan importante el bienestar físico como el bienestar emocional, y por ello, te proponemos 7 técnicas para reducir y controlar la ansiedad.
- Respiración diafragmática: cuando hacemos ejercicio físico o sentimos ansiedad, la frecuencia y la intensidad de la respiración aumenta, y cuando estamos relajados disminuye y se vuelve más diafragmática. Por lo tanto, si aprendemos a respirar de forma diafragmática, nos ayudará a relajarnos y controlar la ansiedad.
- Relajación: en momentos que estamos nerviosos, asustados o enojados se activa el Sistema Nervioso Simpático, esto implica cambios fisiológicos como la tensión muscular. La relajación ayuda a activar el Sistema Nervioso Parasimpático, que hace que la tasa cardíaca y la tensión muscular disminuyan, la respiración se vuelva más lenta y bajen los niveles de alerta. La relajación se puede trabajar a través de la respiración, la meditación o el yoga, entre otros. La puedes llevar a cabo con nuestras clases de yoga de DiR en Casa.
- Autoinstrucciones: son mensajes que nos decimos a nosotros mismos para controlar las crisis y la ansiedad anticipatoria. Permiten detectar las interpretaciones catastrofistas y cambiarlas por pensamientos positivos y realistas. Contrarrestando así, la tendencia automática de los pensamientos negativos ante la situación temida y que genera malestar.
- Gestión del tiempo: en momentos de confinamiento podemos perder la noción del tiempo y tener la sensación de que los días están siendo poco productivos. Crear un horario ayuda a tener tiempo para todas las tareas, evitando así que, las responsabilidades se acumulen al final del día o de la semana y sea una fuente de estrés. Es necesario que cada persona cree su horario adaptado a su nueva realidad y prioridades.
- Contacto social: las relaciones y la comunicación con otras personas son un potente regulador emocional y motivacional. Aunque sea virtual, el contacto con la familia y los amigos son una red de apoyo emocional muy importante.
- Estilo de vida saludable: mantener una alimentación equilibrada, alejada de la alimentación ansiosa, fomentar la higiene del sueño y practicar ejercicio físico, son aspectos básicos para promover la salud emocional.
- Ayuda de un profesional: si lo necesitas, busca ayuda de un profesional, más vale prevenir que curar. Ellos te ayudarán a gestionar el malestar y te darán herramientas para hacer frente a estas situaciones.
Juntos lo conseguiremos, ¡y esperamos que muy pronto puedas sentirte como antes!
Por: Anna Costa
Psicóloga Sanitaria y Pedagoga
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