¿Tú también te preguntas cómo ha triunfado una dieta que alarga el ayuno durante 16 horas y solamente deja comer 8 horas al día?
Todo empezó a finales de 2013, cuando algunos blogs de fitness introducían el término “ayuno intermitente” –que proviene de la traducción de “fast diet” o “intermittent fasting”. Por aquel entonces las dietas más populares eran la Dukan o la Detox, mientras el ayuno intermitente prácticamente no despertaba ningún interés entre los devoradores de tendencias relacionadas con la nutrición.
Como cualquier moda, bastó que media docena de famosos aseguraran que el ayuno intermitente era su secreto para conseguir una figura esbelta y este empezó a conquistar las redes sociales. Uno de los primeros en confesarlo fue Benedict Cumberbatch, el actor que interpreta el papel de un escuálido Sherlock Holmes; también tenemos a Hugh Jackman, conocido por encarnar a Lobezno en la película de X-Men; y más tarde se sumó a la moda Elsa Pataki, que recientemente informó sobre ello en un programa de televisión. Tampoco han faltado parodias, como esta de Vengamonjas que llevan hasta el extremo este nuevo método.
Varios medios en internet también han ayudado a que este método sea considerado uno de los temas nutricionales de referencia en el 2019. Según datos de Google Trends, actualmente su interés en las redes se mantiene alza y ya ha superado a la dieta Dukan o la Detox. Sin duda alguna tendremos ayuno intermitente para rato durante el 2020.
Qué opinan los expertos sobre el ayuno intermitente
El ayuno intermitente es un método que puede realizarse de dos maneras diferentes. La más habitual es utilizar 8 horas del día para comer y las 16 restantes realizar el ayuno, es decir, no comer nada y solamente beber agua o tes. También existen variaciones más laxas de 10/14 y más complejas de 6/18. Otro tipo de ayuno intermitente es comer 5 días a la semana y los otros 2 días no comer sólidos o aplicar una restricción calórica del 25%.
Uno de los últimos estudios sobre ayuno intermitente publicado por el Doctor Mark P. Mattson, recopila los resultados de diferentes ensayos con animales y humanos que han seguido esta dieta. En un principio el autor asegura que “la práctica del ayuno intermitente supone beneficios para la salud en cuanto a la obesidad, diabetes tipo 1 o 2, enfermedades cardiovasculares y algún tipo de cáncer”. Pero precisa que los estudios realizados con humanos han sido realizados con personas jóvenes y de mediana edad con sobrepeso, por lo que “no se podría generalizar al resto de grupos de edad y población los mismos beneficios que se han observado en estos estudios”.
“La dieta de ayuno intermitente es un tema delicado” advierte Marta P., responsable del servicio de nutrición de Clubs DiR. Marta explica que “puede resultar una buena estrategia para mejorar la composición corporal y algunos parámetros analíticos relacionados con la salud”. Aun así, no es la única estrategia nutricional ni la mejor en muchos casos, ni tampoco es aconsejable para cualquier persona “porque la mayoría de pacientes no son capaces de seguirla debido a la dificultad de pasar tantas horas sin comer, y eso hace que no se adapte a sus vidas, que es lo principal”.
Este método podría aplicarse en personas que no suelen cenar y tampoco tienen hambre cuando se levantan, “las que han adquirido este hábito podrían ser capaces de hacerlo, pero sin duda no es lo más habitual”. Además, hay cierta confusión en cuanto a lo que se puede comer, porque de nada sirve alargar el ayuno diario y después alimentarse a base de comida basura: “no consiste en comer menos, sino mejorar la calidad de los alimentos que consumimos. A través de una educación nutricional se puede conseguir un cambio de hábitos y poco a poco añadir nuevas estrategias para mantener una vida y alimentación saludable; el ayuno intermitente debería ser el último paso cuando una persona ya tiene conocimientos sobre el resto”.
Si estás pensando en probarla, sin duda lo más importante es que lo hagas con la supervisión de un experto en nutrición. La precaución debe ser máxima ante nuevas modas que surgen en internet y el mejor consejo es acudir previamente a un especialista, para estudiar tu caso y recomendarte la mejor estrategia nutricional para conseguir tus objetivos adaptándose a tu estilo de vida.
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