Todo el mundo quiere vivir más tiempo y sin condicionantes graves, una lucha que existe desde que el ser humano es ser humano y una preocupación que la población mundial comparte más allá de cualquier frontera. Por el momento, la ciencia no ha descubierto el secreto de la inmortalidad, pero vencer el envejecimiento está en nuestras manos, puesto que no todo es genética, sino hábitos saludables.
Lo dice la Organización Mundial de la Salud: «Hacer deporte tiene importantes beneficios para la salud del corazón, el cuerpo y la mente» y esto se traduce en una mejora de la calidad de vida y un menor riesgo de enfermedades. Si añadimos que nos encontramos en edad adulta, la estadística indica que las personas que no se ejercitan tienen un peligro de muerte de entre un 20% y un 30% más elevado.
La recomendación oficial de la OMS es practicar 160 minutos de rutina moderada o 75 minutos de rutina más intensa de forma semanal pero, si no se llega, lo más valioso es moverse y, sobre todo, tener claro que siempre es buena idea empezar. La decisión debe acompañarse a la vez de una concienciación sobre llevar una alimentación equilibrada y variada.
Los ejercicios más eficaces son los aeróbicos, para reforzar el aparato cardiovascular; los de fuerza, por ganar en autonomía; y los ejercicios de estiramientos, para tener mayor flexibilidad. Una buena combinación entre los diferentes movimientos atrasará y prevendrá las consecuencias del envejecimiento, eso sí, hay que tener cuidado con el empuje para no caer en lesiones.
Desde DiR te recomendamos una serie de actividades para hacer frente al paso del tiempo:
- Natación: catalogado como el deporte más completo, es un ejercicio de bajo impacto que fortalece los músculos y mantiene las articulaciones en buen estado.
- Yoga: de la mano de YogaOne, esta práctica milenaria permite mejorar el equilibrio y enseña técnicas de respiración que aportan un bienestar general.
- Baile: aumenta la capacidad de coordinación y respuesta neuromotora al ritmo de la música favorita.
- Ciclismo: desde una bicicleta estática, a ritmo individual o colectivo, quema grasa y eleva el metabolismo.
- Pilates: estiramientos lentos y suaves para relajar tensiones y corregir posturas corporales.
El deporte, además, tiene una fuerza inconmensurable como herramienta social, pues se convierte en una oportunidad de conocer gente nueva y forjar amistades duraderas. Relacionarse con diferentes personas es primordial para no sentirse solo o aislado, unos sentimientos que pueden surgir con mayor frecuencia y de forma más aguda durante la etapa de la adultez madura y que hay que combatir para evitar que desemboquen en ansiedad o depresión.
¿Que piensas?