Todos podemos convertirnos en triatletas y disfrutar de una prueba que garantiza un cuerpo en forma, una mente a derramar de motivación, y un horizonte lleno de retos.
Nadar, pedalear, y correr son los tres deportes con más practicantes a nivel mundial. La triatlón junta las tres disciplinas en una misma prueba que se ha popularizado mucho. Visto desde la grada, puede parecer uno de los deportes más duros del planeta, y los triatletas unos extraterrestres capaces de todo.
Pero, qué tiene la triatlón que engancha tanto? Es necesario ser un súper deportista para practicarlo?
Superarse es el premio
La triatlón es un deporte muy especial que todos ganan, del primer al último al cruzar la línea de llegada.
Existe una elite que se entrena y vive enfocada a conseguir la victoria absoluta, pero para la gran mayoría de los triatletas el premio es acabar aquello que se han propuesto y convertirse en finishers. Cada uno tiene sus sueños y hay triatlones a la medida de todos.
Si nos gusta correr, nadar, y pedalear, podemos apuntarnos a un triatlón de distancia sprint, ideal para iniciarse. El sector de natación son 750 m, el de bicileta, 20 km, y la carrera a pie, 5 km. A medida que ganamos confianza, podremos dar el paso hacia la distancia olímpica (1,5 km/40 km/10 km), y más adelante, al legendario ironman (3,8 km/180 km/42,2 km).
Planificar el sueño
Muchos triatletas coinciden en que la agenda es la primera herramienta de entrenamiento. Tener en cuenta las fechas ayuda muchísimo a establecer objetivos y planificar la preparación para estos retos. Fuera de la temporada de verano, se pueden correr duatlones ( carrera a pie/ bicicleta/ carrera a pie), y de unos años hasta ahora, se han popularizado mucho las duatlones de montaña, que se disputan con bicis de todo terreno y circuitos de trail-running. Las aquatlones, con dos tramos de carrera a pie separados por una travesía de natación también se llevan a cabo en verano.
Prepararse como se debe
Cada persona es diferente y cada plan de entrenamiento debería de ser individual y preferiblemente supervisada por un profesional del deporte, pero, en general, se considera que un deportista habitual puede prepararse para un triatlón de distancia sprint en un periodo de cuatro semanas.
Se aconsejan dos sesiones semanales de natación, una de ciclismo y dos de carrera a pie. El objetivo es progresar poco a poco en las tres disciplinas, por lo cual, se recomienda hacer series y cambios de ritmo en lugar de sólo cubrir tiradas largas.
5 consejos para el primer triatlón
- Nadar, pedalear, y correr se complementan a la perfección. No es necesario entrenar el triple. Valores como la resistencia, son comunes a los tres deportes y se van traspasar de una disciplina a la otra.
- Si tu fuerte es la cursa a pie, pero no tienes mucha práctica en la piscina, dedica tiempo a mejorar la técnica nadando.
- En triatlones cortas la bici es el sector más fácil, pero conviene haber rodado con ella y entrenar la transición a cursa ( no es necesario correr muchos kilómentros) Prueba también antes el resto del material ( neopreno, zapatillas, gafas de natación…).
- El día de la prueba desayuna con tiempo suficiente para hacer la digestión. Durante la bicicleta, hidrátate y come alguna barrita para tener más energía durante la cursa a pie.
- Recuperarse de una triatlón de dos horas es más fácil que recuperarse de una carrera a pie de la misma duración. Igualmente, descansa como mínimo un día o dos antes de volver a hacer ejercicio.
¿Que piensas?